En defensa del género juvenil (Young Adult)
diciembre 07, 2016El género juvenil, mayormente conocido como Young Adult Literature (YAL o YA), tiene a los jóvenes como protagonistas y está llamando muchísimo la atención.
Lamentablemente son numerosos los prejuicios que giran en torno a él, en este árticulo tengo el objetivo no solo de dar a conocer sus origenes, sino también de refutar las injustas críticas que sufre el YAL.
Lamentablemente son numerosos los prejuicios que giran en torno a él, en este árticulo tengo el objetivo no solo de dar a conocer sus origenes, sino también de refutar las injustas críticas que sufre el YAL.
Estoy seguro que todos están al tanto del fenómeno más reciente que gira en torno a la literatura, cuya popularidad ha generado tal repercusión que ha logrado captar la atención del mundo del cine, sin mencionar la cantidad de escritores que se han animado a escribir una novela de este género saltando a la fama y que ha logrado ganar un gran terreno como pasatiempo e intereses de los adolescentes.
Esto último se puede apreciar realmente con otro fenómeno que actúa como consecuencia, los bloggers, booktubers e instagrammers.
¿De qué estoy hablando?
Del género Juvenil, mayormente conocido como Young Adult Literature (YAL o YA), que tiene a los jóvenes como protagonistas y está llamando muchísimo la atención tanto a editoriales como a la industria del cine, ya que se está produciendo más contenido enfocado al público juvenil, con adaptaciones cinematográficas de novelas YAL más destacadas a nivel internacional y grandes editoriales dedicadas en la búsqueda de talentosos escritores, con el fin de producir más novelas que pertenezcan a dicho género.
Sin lugar a dudas los jóvenes son los protagonistas de una era literaria, enfocada en el público adolescente, que está repercutiendo considerablemente en la literatura y generando muchísimo dinero.
Pero no todo son flores y rosas, como estamos hablando de un género que se popularizó a nivel internacional siempre existirá malas lenguas que buscarán encontrarle el lado negativo, por lo que podemos encontrar críticas que se enfocan en menospreciar al género en lo que respecta a la profundidad y madurez del mismo, y este será el tema principal del que les quiero hablar.
¿Cuándo surgió?
Existen numerosos prejuicios alrededor de este género, nos encontramos con que muchas personas (especialmente los adultos) tienen varios conceptos erróneos acerca del YAL, por lo que es menester indagar en su origen y significado.
Bien, hay que aclarar desde el vamos que no se sabe con certeza el nacimiento de estos títulos, cuáles fueron los “primeros”. Se saben de algunos casos como la novela australiana de 1897 “Teens”, también Alcott (la escritora de “Mujercitas”) y Horatio Alger, fueron los primeros que escribían principalmente para lectores que no sean niños ni adultos. No obstante como sabemos, en el siglo XIX no se tenía la misma concepción del “joven adulto” que ahora, de hecho ni existía, ya que la adolescencia es una concepción cultural contemporánea.
Por lo que no se sabe con certeza el nacimiento de dicho género, únicamente puedo mencionarles como dato que el boom del género vino después de la Segunda Guerra Mundial, cuando la situación política se estabilizó y la gente regresó a su vida después de la guerra. Al mejorar la sanidad y la alimentación, desencadenando en un crecimiento de esperanza de vida, permitió a los jóvenes que enfocaran su tiempo a hobbies y actividades ociosas, en vez de ponerse a trabajar desde una edad muy temprana. Entre varias actividades, al disponer de tiempo libre los jóvenes querían leer, pero tenían el inconveniente de no encontrar textos con los que sentirse identificados, novelas que respondiesen y retrataran sus inquietudes. Los libros infantiles por obvias razones no atraían a jóvenes de 16 años, por lo que terminaban buscando en la sección de adultos. De esta forma se encontraban con libros como El guardián entre el centeno, El señor de las moscas e incluso Matar a un ruiseñor. En numerosas ocasiones se han considerado estos libros como juveniles, cuando no es así. No fueron escritos ni publicados para el público juvenil, por lo que queda en evidencia una sola cosa. Estos libros, fueron abrazados por los jóvenes, por lo que no los convierte en YAL, no obstante, el que acabó haciéndolo fue la Asociación Americana de Bibliotecarios (ALA) al reconocerlos como novels for Young adults, gracias al éxito que tuvieron entre el público juvenil, a pesar de no haber sido escrito para los jóvenes. Por lo que, es imposible saber cuál fue la primera novela de ficción juvenil.
Entonces, ¿Qué es el Young Adult? ¿Qué edades abarca?
No es para nada fácil definir la franja, puesto que el género está íntimamente ligado con la adolescencia (que no olviden, es una construcción cultural), por lo que dicha franja es dinámica. Con el tiempo irá cambiando y variando.
Según Michael Cart, el Young Adult es cualquier individuo entre los 10 y 25 años (Cart 2008), pero estoy seguro que más de uno habrá visto que la franja se amplía por varios años más.
Las divisiones que tiene el Young Adult están íntimamente relacionadas con las necesidades psicológicas y emocionales del ser humano durante su desarrollo. Estoy seguro que muchos saben que si bien la etapa de la adolescencia es relativamente corta, los cambios físicos y psicológicos que sufre son enormes.
La Academia Americana de Psicología Infantil y Adolescente dividió este proceso en diferentes etapas a las que corresponden tipos de necesidades diferentes. Estoy hablando de: la adolescencia temprana (12 a 14 años), la media (14 a 16), y la tardía (17 a 19).
Por lo tanto, hay lecturas dentro del género YAL que pueden disfrutar aquellos lectores de 19 años y que no va a agradarles a niños de 12, como viceversa, hay novelas enfocadas en niños de corta edad que no disfrutarán lectores de 18 años, a pesar de pertenecer al mismo género.
Eso incluye también a personas de 30 años que no son inmaduros por disfrutar del YAL, recuerden lo que mencione anteriormente, hay una variedad enorme de títulos dentro del mismo género orientado para diferentes edades, también hay adolescentes que no se decantan por ningún libro del género YAL y eso está perfecto, gustos son gustos. Puede que el día de mañana el mercado se renueve apareciendo títulos del género que te llamen la atención aunque no sea tu género literario favorito. Con todo lo anteriormente expuesto, ya saben cómo funciona la cosa.
Atacando al prejuicio en sí
¡Pero La Literatura Juvenil es para niños!
Si, puedo entender que algunos piensen así porque comúnmente los libros pertenecientes al YAL se encuentran dentro de la sección infantil de las librerías, aspecto que personalmente detesto porque no puedo dejar de sentir vergüenza cada vez que accedo a dicha sección porque se que ahí se encuentran los libros que estoy buscando.
¿Pero saben lo que es curioso? Las tiendas de libros estadounidenses tuvieron que cambiar de sitio el Young Adult, porque los adolescentes no se animaban a acceder a la sección infantil para encontrar su género favorito, detalle que repercutió negativamente en las ventas. (Yampbell 2005: 352-3)
Si estuvieron leyendo hasta aquí, sabrán que el género juvenil esta ligado íntimamente a las diferentes etapas del desarrollo cognitivo y emocional del adolescente. Por lo que menospreciar el valor de la literatura juvenil es menospreciar la importancia de su desarrollo, tanto educativo como psicológico. Por lo que denominar infantil el Young Adult, es meter en la misma bolsa el tono, los temas y la técnica literaria de ambos géneros, craso error.
No olvidemos de lo mal que esta utilizar la literatura infantil como un insulto, no desvaloremos el trabajo de talentosos autores con prejuicios de lo más ridículos y sin fundamento.
Por eso, aquella persona que tacha de infantil e incluso de inmaduro el género infantil la considero una persona ignorante… y una persona que se esta perdiendo de mucho.
Una persona que considera al YA como inmaduro, no tiene en cuenta que hay títulos dentro del género con críticas sumamente interesantes hacia la sociedad capitalista (Los juegos del hambre), novelas que hacen representaciones maravillosas sobre el compañerismo, la amistad y el amor, libros que tocan temas delicados, hablan de la sexualidad abiertamente, libros cuyo objetivo es transmitir al lector valores indispensables, educándolos y desarrollándolos como personas. Se olvidan también de que hay numerosos libros que transmiten mensajes muy importantes sobre la moralidad, multiculturalidad e inmigración. Novelas que, mediante una historia atrapante, nos acerca a la historia de una manera profunda y entretenida.
Otro ejemplo más, por si no es suficiente, Harry Potter, la historia de un joven mago con cicatriz en forma de rayo y el destino que debe enfrentar en la lucha entre el bien y el mail. Esta mítica saga que para nadie pasa inadvertido, sentó los referentes para que toda una generación de lectores se dejara cautivar por novelas cuya extensión sorprendía a los padres y docentes, demostrando a fin de cuentas la profundidad que puede presentar el universo de un libro perteneciente al Young Adult Literature, género que ha conseguido ocupar un pequeño hueco en el mundo cinematográfico con películas como: Harry Potter (toda la saga), Divergente (que hasta hace poco cubrieron la trilogía completa), La ladrona de libros, La quinta ola (película muy reciente que salió a principios del 2016), El dador de recuerdos, Diario de una princesa (no tenía ni idea que estaba basada en un libro), Las crónicas de Narnia, Soy el número cuatro, Percy Jackson, Maze Runner (la cual está teniendo mucho éxito), The perks of Being a Wallflower (que sería Las ventajas de ser invisible/marginado), Los juegos del hambre, El juego de Ender, Bajo la misma estrella y Ciudades de papel (no se si hay más películas basadas en novelas del prolífico escritor John Green), creo que Cazadores de Sombras tiene una película (no estoy seguro) y mi tan odiada Crepúsculo (toda la saga fue llevada al cine, los motivos por los que me desagrada la saga son meramente personales jaja)
Como pueden ver, el Young Adult Literature tiene tantos lectores de numerosas edades (que ya dejamos claro previamente) y generó tanto impacto en el mundo de la literatura que se ha ganado un lugar en el mundo cinematográfico, y con el paso del tiempo seguirá ganando más y más terreno, son películas que no están enfocadas en niños sino en jóvenes de diversas edades, estoy seguro que aquellas personas que critican duramente el género tachándolo de infantil se sorprenderían al saber que varias de las películas que mencioné previamente la disfrutan jóvenes de incluso 29 años.
Ah y quiero detallar otro prejuicio que está muy popularizado, que una novela tenga como protagonistas a jóvenes adolescentes no significa que es = a Young Adult, un ejemplo perfecto es La Ladrona de Libros, cuya protagonista tiene 12 años pero cuando se publicó pertenecía a la literatura adulta, luego fue etiquetada como género YA gracias a que presentaba una narrativa sencilla y una protagonista muy joven, teniendo en cuenta que los libros del género juvenil se venden muchísimo más pensaron que los jóvenes podrían disfrutar también de esta increíble novela.
Personalmente creo que, haciendo hincapié en los adultos que juzgan de esta manera al Young Adult, solo conocen al género por novelas destacadas como Harry Potter, Crepúsculo, Los juegos del hambre, entre otros y nunca le dan la oportunidad de leer algún título del YA para comprobar si de verdad es tan “infantil” como les parece. Ni siquiera tienen en cuenta el extenso catálogo que brinda este género, ya que pecan por encasillar a todos los libros del Young Adult en la franja de edad entre los 12 a 16 años, un error que solo los perjudica a ellos, pues se están perdiendo de verdaderas joyas que podrían disfrutar de igual manera (o incluso más) que novelas pertenecientes a la literatura adulta.
En conclusión
Lo que de verdad importa es que el género juvenil no solo invita a los jóvenes al maravilloso mundo de la literatura presentando libros atractivos para diferentes edades, sino que también posee joyas que merecen ser leídas por lectores de todas las edades ya que no tienen desperdicio. Me gustaría que algunos adultos se tomaran la libertad de dejar de lado los prejuicios y disfruten de este tipo de lecturas, ya que se estarían haciendo un favor a sí mismos, incluso si se dan el lujo de elegir un título cuyo objetivo sean lectores muy jóvenes, no deberían sentirse mal por hacerlo pues todos tenemos un niño escondido dentro de nosotros, un niño que nunca deberíamos olvidar ni menospreciar.
Quiero mencionar que varios de los puntos teóricos que presenté en esta entrada lo extraje del siguiente artículo (con el debido permiso de las webmasters): Young Adult: combatiendo prejuicios.
Los invito a que lo visiten y lean ya que es sumamente interesante, me ayudó muchísimo a fundamentar mi opinión sobre los prejuicios que sufre este género, por lo que si disfrutaron de mi entrada estoy seguro que les va a encantar la suya.
¿Cual es tu opinión con respecto al YAL?
¿Estas de acuerdo con sus prejuicios?
¡Deja tu comentario!
1 comentarios
¡Hola! La verdad es que a veces veo en Facebook críticas a la literatura juvenil y no lo entiendo. Soy profesora de Lengua y Literatura, y mi postura es abierta, me gusta disfrutar de clásicos y de vez en cuando alguno juvenil, justamente porque voy a enseñar a adolescentes (!). Mi crítica es con algunas novelas dentro del género que son escritas solamente para ganar plata y están vacías de contenido. Estaría bueno ver recomendaciones de libros juveniles que dan lugar a la reflexión, como Los Juegos del Hambre o Maze Runner (que cuestiona a la autoridad, lo que está bien y lo que está mal, etc), porque me parece que otras como Divergente o La quinta ola son puro entretenimiento (lo que no está mal, pero me interesa que la lectura te deje "algo").
ResponderEliminar¡Saludos!